El conglomerado alemán Volkswagen informó este jueves que ha experimentado una pérdida neta de 1.070 millones de euros (1.240 millones de dólares) en el tercer trimestre de este año, su primera pérdida trimestral en cinco años, recoge Deutsche Welle.
De acuerdo con el informe de la compañía, sus pérdidas operativas en el tercer trimestre de 2025 fueron de 1.299 millones de euros, cifra que contrasta con los 2.833 millones obtenidos en el mismo trimestre de 2024. Asimismo, mientras que hace una año la automotriz tuvo unos beneficios de 1.558 millones de euros, este año ha registrado una pérdida neta de 1.072 millones.
Los datos indican que en los nueve meses de 2025 Volkswagen arrojó un resultado operativo de 5.408 millones de euros, lo que representa una caída del 57,8 % en comparación con el año anterior. Por otro lado, sus beneficios fueron de 3.405 millones de euros, un declive de un 61,5 % frente al mismo periodo en 2024.
"Una situación mixta"
El director financiero de la empresa, Arno Antlitz, afirmó que el resultado fue "mucho más débil" que el del año anterior, atribuyendo las pérdidas a "los aranceles más altos, el ajuste de la estrategia de producto en Porsche y las depreciaciones del valor de Porsche". Sin esos factores negativos, el margen operativo de Volkswagen habría sido del 5,4 %, detalló el ejecutivo.
"En los primeros nueve meses del año hemos observado una situación mixta", señaló Antlitz. "Esto se debe, en parte, al aumento de la producción de vehículos eléctricos, que tienen un menor margen de beneficio. Además, registramos gastos, principalmente derivados del incremento de las tarifas y del ajuste de la estrategia de producto en Porsche", explicó.
Volkswagen, en riesgo de colapso
Previamente se informó que el grupo Volkswagen enfrenta un déficit de 11.000 millones de euros para el próximo año, lo cual lo coloca al borde una crisis financiera. Aparentemente el conglomerado, que agrupa conocidas marcas de automóviles de la talla de VW, Porsche, Audi, Seat, Skoda y Traton, presenta problemas con el flujo neto de caja (efectivo realmente disponible).
Además, la restricción de la exportación de chips chinos ha obligado a suspender la fabricación de su emblemático modelo Golf en la planta de la ciudad alemana de Wolfsburgo, la principal y la más grande de la empresa. Ello supone una interrupción en una de las líneas de producción de automóviles más largas de la historia.
