El Departamento de Defensa de Estados Unidos aplicará una nueva política que dificultará que los soldados transgénero en el país puedan recurrir a juntas militares para defender su derecho a permanecer en el Ejército, según un memorando obtenido por AP.
El presidente Donald Trump firmó una orden ejecutiva en enero que imposibilita a personas de este colectivo el alistamiento en el sevicio militar. Estas medidas han enfrentado resistencia en los tribunales, pues los soldados transgénero y sus partidarios afirman haber demostrado su valía para las Fuerzas Armadas.
El nuevo documento, emitido el 8 de octubre, autoriza a los comandantes a revocar las decisiones de las juntas de separación militar sobre la aptitud de los miembros transgéneros para servir. Esto supone una ruptura con la normativa vigente que establece que las juntas actúan de forma independiente.
Disforia de género
Por otra parte, el memorando establece que los reclutas trans deben presentarse ante las juntas de separación con uniformes que coincidan con el género que se les asignó al nacer. Si no lo hacen, no se los acepta en la sesión y constará que no se han presentado. En estas circunstancias, su ausencia puede usarse en su contra.
Esta política sigue una directiva de la Fuerza Aérea de Estados Unidos, que estipula que estos consejos militares no pueden decidir de forma independiente si mantener o dar de baja a las tropas transgénero y, en cambio, "deben recomendar la separación del miembro" si tiene un diagnóstico de disforia de género, es decir, cuando el sexo biológico de una persona no coincide con su identidad de género y eso le produce un malestar emocional.


